Vestido corto, con cuello clásico y manga larga. Confeccionado completamente en viscosa y con un ajuste holgado perfecto este vestido desprende una esencia muy femenina y es tan suave como la seda. Le pusimos unos cordones entrelazados en el escote para darle esa inconfundible estética de oeste y lo terminamos con boleros en los puños y el dobladillo para aportar movimiento adicional a la prenda. Combina con unos botines en cuero y queda listo para el fin de semana.